Cuatro semanas. Cuatro condenadas, pero gloriosas, semanas. Exáctamente cuatro semanas para el fin de las clases, para el fin de nuestro penúltimo año en la High Brigh. Es raro pensar que éstas van a ser nuestras últimas vacaciones de verano entre los años lectivos. El año que viene va a ser otra cosa, completamente. Quinto año, o más comúnmente llamado, tercero pol. Y luego ¿quién sabe? Ojala tengamos éxito en el camino, todo el éxito que las ladies merecen.
Pero en fin, hay que sobreponerse a estas cuatro semanas y seremos libres. Y entre medio de ellas habrá exámenes integradores, fiestas de egresados, pruebas finales, cafés literarios y tal vez alguna que otra noche libre para descansar de tanto libro y tanto resumen.
El fin de semana relajante ya pasó, entre salidas al Abasto, Starbucks, noches de boliche, tenis, mates y tal vez alguna carrea de Matías.
Por esta semana tenemos pruebas de Química, Geografía, lecciones de filosofía... Pero ya la próxima nos encuentra desamparadas una prueba integradora de Lengua, que no la vemos ni cuadrada, y que no nos es perpendicular. Media pila profesora, que no está para nada piola no entender nada de su materia.
Que nos sea leve, por favor.
Queen N & Lady A.
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